Una palabra que no había escuchado hasta hace unos meses a pesar de ser aragonesa, desde pequeñita siempre había oído llamarla "la banca" un mueble que no faltaba en ninguna casa del barrio donde me crié, donde me daban las sopas de pan para cenar, donde mis vecinos jugaban a las cartas junto al fuego y donde mas tarde veía la televisión en blanco y negro, por ello me permitiréis que la llame de la forma que se conoce en Caspe " la banca"
La banca que os muestro estaba como la mayoría de estos muebles en una bodega guardada, que no olvidada, ya que su dueña no quería que pereciera allí
Cuando apareció la pintura sintética se pintaban las bancas para que estuvieran siempre limpias escondiendo así sus magnifica madera
Ese fue el primer paso, eliminar todas capas de pintura, y como suele ser habitual en los muebles pintados y guardados en lugares húmedos como bodegas, tenia hongos, eliminarlos seria el siguiente paso a realizar para que la madera quedara seca y protegida
Al eliminar la pintura salio en la parte de atrás el barniz original y este sello que certifica que esta banca se fabrico en Caspe, y que por supuesto, lo he conservado
Un precioso mueble lleno de recuerdos